domingo, 1 de marzo de 2015

Vía Triple Indirecta al peñón de Ifach

Iñaki Miró, blog de montaña y literatura
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Vía Triple Indirecta, Peñón de Ifach


El Peñón de Ifach, mole rocosa de 332 m de altura en el municipio de Calpe, comarca de la Marina Alta, en la Costa Blanca alicantina, es uno de los últimos baluartes rocosos con los que el Sistema Ibérico termina muriendo en el mar Mediterráneo.


Hacia el sur- sudeste presenta una formidable pared de roca calcárea de casi 300 m de altura y cerca de un kilómetro de longitud, donde los escaladores autóctonos han abierto multitud de líneas- vías de escalada-, la mayoría de alta dificultad.


El pasado 24 de enero, 2015, Alex, Javi y yo fuimos hasta Calpe para escalar la vía Triple Indirecta, una bella línea de escalada que combina largos de tres vías diferentes: Anglada, Revelación y Mistela.



Esta bella combinación de tres vías diferentes- como se puede ver en esta reseña descargada de la página ElevArte- fue escalada por primera vez en el año 2000 por Roy de Valera y Miguel Cebrián. Tiene una longitud aproximada de 330 m y una dificultad máxima (no obligada) de 6c.


Como somos tres hemos decidido repartirnos los largos y Javi empieza de primero atacando los largos de la Anglada.


El primer largo de la Anglada es espectacular. Los primeros veinte metros son comunes con la vía Gómez-Cano. Es absolutamente vertical y la roca enseguida te pone en tu sitio. Está asegurada con parabolts, clavos viejos e incluso algún puente de roca enhebrado. Es un primer largo para entrar en calor.


En la imagen se ve a Javi iniciando los primeros movimientos verdaderos de la Anglada, en el lugar donde ésta vía se separa de su vecina la Gómez-Cano, y además el lugar donde empieza la zona más dura y difícil del largo, los metros de 6c que le separan de la reunión.


Son unos metros complicados y muy "peñoneros", ligeramente desplomados, en diagonal, con cantos romos y roca que en algunos lugares ofrece ese aspecto pulverulento y quebradizo tan característico.


Javi ya ha llegado a la reunión y nos recoge las cuerdas a Alex y a mí. En esta ocasión el único que ha traído cámara a la pared es Alex, por lo que el mérito de todas las fotos es suyo y además él es el único que no aparece en las mismas. Otra vez será.


La llegada a esta primera reunión es verdaderamente difícil, probablemente el paso más complicado y difícil de resolver de toda la vía. En la imagen se ve bastante bien la configuración de la roca.


Una vez llegados todos a la primera reunión, Javi comienza el segundo largo. Los primeros pasos son en libre, una travesía sencilla, hasta que comienza el muro vertical. le dan una dificultad en libre de 6c, aunque yo lo suelo hacer en A0. Una vez terminado el muro el largo continúa con una travesía en diagonal ascendente hacia la derecha, de V grado.


Llegando a la segunda reunión.


Desde aquí, el panorama que vemos mirando a la costa es espectacular. En primer plano el Morro de Toix, en segundo lugar la Sierra de Aitana, con las cumbres del Ponoig, a la derecha, y del Puig Campana a la izquierda.


El tercer largo es una travesía de mediana dificultad, larga, que conecta las vías Anglada y Revelación, con la que conectamos en su tercera reunión.


La llegada a la tercera reunión de Revelación es por una placa tumbada, algo raro de encontrar en los muros verticales del Peñón. Al fondo vemos la Sierra Gelada, sobre la ciudad de Benidorm.


Javi asegurándonos en la tercera reunión. Aquí cambiamos de cuerdas y continúo yo escalando de primero.


El cuarto largo, ya en la vía Revelación, es un largo corto, de unos veinticinco metros, y una dificultad de 6a, bastante peñonero, vertical, de roca mediocre y pocos seguros.


Y llegamos por fin al largo clave de la vía, el diedro blanco, difícil y escasamente asegurado.


La dificultad de este largo es de 6b+. pero no os dejéis engañar por estos números, su validez es relativa. Es un largo de los que llamamos "peñonero", de cantos romos y escasamente adherente, sólo para especialistas.


De cualquiera manera, podamos hacerlo en libre o no, el diedro es una escalada de las más bonitas del Peñón, y que siempre nos dejará un buen recuerdo.


Si no recuerdo mal el diedro tiene tres parabolts para asegurarnos, pero siempre metemos un par de friends para mayor seguridad y para progresar.


El espectáculo de la bahía de Calpe desde la pared. A la izquierda el desfiladero de Mascarat y al fondo las sierras de Oltá y Bernia.


En la quinta reunión. Todavía me toca abrir un largo más, sencillo, para acceder al último tramo de la vía, donde nos salimos de Revelación y atacamos la tercera parte de la vía: Mistela.


Javi llegando a la quinta reunión, saliendo del diedro gris.


En la vía Mistela le ha tocado a Alex ir de primero. El primer largo es absolutamente vertical, difícil, con una configuración de la roca en forma de bolos, que nos recuerda a la Visera de Riglos.


Javi y yo en la reunión, observando cómo Alex se curra el desplomaco de salida del segundo largo de la vía Mistela.


Ufff, el último paso desplomado es impresionante y enseguida te pone en tu sitio.Y desde aquí, el último largo de la vía, el noveno, es sencillo, corresponde al último de la vía Anglada.


Y de nuevo en la cumbre del Peñón. Otra vez más, otra vía para recordar y otra experiencia con los mejores compañeros. Gracias a ellos.