Vía Monsieur, Montanejos.

Iñaki Miró,    Guía de Montaña, Escalada, Espeleología y Barrancos
Página web:  http://inakimiro.jimdo.com/
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La vía "Monsieur" del Barranco de la Maimona, Montanejos.

Dificultad de la vía: 6b+. Dificultad obligatoria: 6a- A1. Siete largos. Longitud: 240 m.

Con siete largos y cerca de 250 m de longitud, ésta es una de las vías más largas que podremos encontrar en Montanejos y también una de las más interesantes. Se ha convertido en una gran clásica.

El tres de diciembre del año pasado, Elena, Álex y yo fuimos a Montanejos con la intención de escalar esta fantástica pared. Hacía bastante fresquito a primera hora, pero el día estaba despejado.

Recorrimos caminando el fondo del barranco hasta la base de la pared, y una vez allí comenzamos a subir la pendiente que nos lleva a pie de vía.

El primer largo es sencillo, una trepada de V grado con bastantes hierbajos alrededor. Comienzo mientras me asegura Elena. Álex, como siempre, se entretiene sacando fotos.

Mis dos compañeros vienen detrás. Como podéis ver, la vegetación en Montanejos, a pesar de ser invierno,  crece exuberante. Una adecuada combinación de sol y humedad hace que crezcan matorrales y hierbajos en todas las repisas y grietas.

No sé si para Álex es la primera o la segunda vez en esta vía, pero Elena sí es la primera vez que escala aquí y también la primera vez que acomete una vía larga.

Ese día todavía no lo sabíamos, pero en realidad éramos cuatro personas escalando porque una nueva vida se estaba gestando en su interior. ¡Felicidades para ella y su pareja!

El paisaje de Montanejos es bravío y montaraz, roca, bosques que crecen en fuertes pendientes pedregosas, y la profundidad de los barrancos como telón de fondo de todas las imágenes.

El sol ya ha salido pero hoy no parece que vaya a pegar con mucha fuerza. Aquí iniciando el segundo largo.

La vía está totalmente equipada con parabolts bien metidos, por lo que no hay que llevar material de equipamiento, fisureros o friends.

Este segundo largo es más bonito que el primero, y un poco más difícil. vamos cogiendo altura, la pared se pone más vertical y se suceden los pasos de placa.

Desde la vía Monsieur se ve muy bonito el Paredón del Aguacil, una de las zonas donde más nos gusta escalar.

El Paredón del Aguacil visto desde el otro lado. Justo detrás se encuentra la vertiente en la que estamos escalando, la vía Monsieur.

En el diedro del segundo largo, donde están los pasos más finos de esta mitad inferior de la vía. Álex no pierde tiempo en fotografiar a Elena en una bonita imagen.

La dificultad de este largo es 6a+ con algunos pasos en placa finos, pero tampoco demasiado "apretones". Es una dificultad muy asequible.

Alex llegando a la segunda reunión. Como veis, al final sobra el exceso de ropa y hay que meter todo a las mochilas.

La comarca de Montanejos, una de las grandes reservas forestales de la provincia de Castellón, siempre es un paisaje espectacular.

Elena entrando también en la segunda reunión.

El tercer largo es algo más sencillo que el anterior, también en placa.

Álex y Elena en la segunda reunión. Lástima de foto, que está un poco quemada por el exceso de luz.

La Monsieur es una preciosa vía de escalada, disfrutona en todos sus pasos, y ese día además con un increíble sol de invierno que ya empezaba a calentar.

Una vez termino el tercer largo empiezo a recoger a mis compañeros.

Frente a nosotros, al otro lado del valle, se abre la vertiente por donde transcurre la senda de la Bojera, una bonita excursión que permite hacer un recorrido circular alrededor de todo el barranco de la Maimona.

Ya han llegado al punto en el que la vía Monsieur se junta con otra que discurre más o menos paralela y unos metros a su derecha, "el Río que nos Lleva", un grado más difícil. La salida para ambas vías es común.

El último movimiento del largo es un pequeño paso desplomado de 6a- que lleva a un diedro cómodo donde se encuentra la reunión.

Aquí estoy, en la tercera reunión. Álex ya ha llegado y a Elena le falta poco.

Elena saliendo del pequeño desplome, unos metros por debajo de la reunión.

Una vez superado el pequeño desplome, el diedro es sencillo hasta llegar a la reunión.

Hemos terminado la primera parte. Una gran vira herbosa separa en dos esta gran pared. Al fondo, el comienzo de la segunda parte.

En la base de la segunda parte. Un cable (no necesario) nos permite acercarnos bien asegurado. Esto que voy a decir ahora es una opinión personal, pero me parece que el equipamiento de estas vías de Montanejos es excesivo. Los aperturistas y equipadores se están acercando a las grandes paredes con el concepto de seguridad de las vías "deportivas", más cortas. Personalmente me parece que se abusa demasiado del taladro y las vías pierden bastante emoción.

La segunda parte de la vía transcurre por una pared completamente diferente. La roca aquí es de color rojizo, como corresponde a un calcáreo surcado por grandes desplomes donde apenas da el agua de la lluvia, y está más libre de vegetación.

Esta visión frontal nos revela un aspecto diferente de la pared. La fotografía está sacada hace unos años, un día que cayó una ligera nevada en estas montañas.

Nos sentamos a descansar un poco antes de comenzar. El largo que viene ahora corta el desplome rojo en diagonal, es el más difícil de la vía.

El largo en conjunto tiene una dificultad de 6b+ y es bastante atlético ya que corta el desplome por el medio.  Pero esta dificultad no es obligatoria; se puede hacer en artificial, con estribos, con lo que sería A1 con pasos intermedios obligados de 6a+. Pero aún así el largo es costoso.

Paro un momento a reposar y aprovecho para hacer una foto a mis compañeros, que esperan en la reunión.

Álex me asegura mientras Elena aprovecha para sacar fotos.

Según vamos cogiendo altura la visión del valle, aunque siempre es la misma, va cambiando de perspectiva. Al fondo, el monte La Rosada, de 950 m de altitud, la cumbre más alta de las que cierran por el sur el barranco.

En la vertiente contraria, hacia el norte, el Morrón de campos, de 966 m de altitud, es la cumbre más elevada de estas montañas.

Ya he llegado a la reunión y recojo cuerda a mis compañeros. Álex y Elena acaban de salir de la zona desplomada.

Es un largo duro. Elena, que no está acostumbrada a pasos tan atléticos, ha tenido algunas dificultades para superarlo. Pero todo va bien.

Esta zona de la pared por donde transcurre la segunda parte de la Monsieur es muy espectacular. Como da posibilidades con el tiempo se abrirán rutas de alta dificultad.

Ya estamos los tres en la reunión, cansados pero contentos, como debe ser.

A la izquierda de la reunión, sobre la roca de la pared, vemos este fósil que parece de una concha de peregrino.

Empiezo el segundo largo de la segunda parte. Es bastante más fácil que el anterior, una larga bavaresa tumbada y en diagonal hacia la izquierda sobre una roca rugosa de excelente adherencia.

Esta línea de la Monsieur ataca la pared buscando la fractura más asequible. Por el diedro de la derecha han abierto hace poco una vía llamada Madame bastante más difícil, que va bordeando los desplomes de la zona alta.

Este largo de transición nos pone en treinta metros de cuerda en la quinta reunión de la vía. Álex y Elena, allí abajo, se preparan para continuar escalando.

Elena es la primera en acometer el largo. Como podéis observar, es una placa tumbada con una grieta que la atraviesa, y la roca es bastante rugosa y adherente.

El gran desplome de la zona alta de la pared. La vía Monsieur lo rodea por la izquierda, y la Madame por la derecha.

Álex también ha empezado a escalar. Los árboles que se ven abajo, sabinas, son los de la faja herbosa que hay en medio de la pared.

Es un largo bonito y disfrutón, donde la escalada se hace cómoda y agradable.

Aseguro a mis compañeros mientras atacan los últimos metros de la bavaresa.

Es una grieta perfecta, en diagonal, que atraviesa casi toda la placa desde la cuarta hasta la quinta reunión.

Al otro lado del valle, entre el verdor perenne de los pinos, destaca el amarillo brillante de un arce con el color del otoño.

Álex llega también a la reunión, ya estamos los tres.

Hacia el fondo del barranco la pared continúa.

El sexto largo es corto, algo más de veinte metros. Superamos un corto desplome y entramos de lleno en la última placa que nos lleva directamente hasta la cumbre.

Álex y Elena en la última reunión. Desde aquí, por encima de los desplomes, una placa de 35 m y con pasos de dificultad sobre el 6a nos conduce hasta la cumbre.

Desde aquí se ve el fondo del valle de Montanejos y los pequeños pueblos de alrededor.

Elena terminando los últimos metros de la vía.

Ya hemos llegado a la cumbre. En realidad es una arista amplia, y por el lado contrario a la pared cae una pendiente arbolada que baja directamente hasta el río Mijares.

Es un bosque frondoso de pino laricio que forma una de las masas arboladas más densas de la región. Desde la cumbre, la imagen sobre el desfiladero del río Mijares es espectacular. Ésta es una tierra de bosques, jabalíes y cabras montesas.

Colocamos la cámara en automático y nos hacemos los tres una foto de cumbre.

Recogemos el material y nos preparamos para el descenso. En esta foto se aprecia bien lo que es la arista cimera, cortada a pico por un lado, las paredes del barranco de la Maimona, y la ladera arbolada que baja hacia el norte, hacia el valle del río Mijares.

Y con esta foto del descenso nos despedimos. Hasta la próxima